miércoles, 11 de julio de 2012

Italia tricampeón en España 82

Muchos aún seguimos lamentando la derrota de Italia frente a España en la final de la última Eurocopa. Sin embargo, para ahogar las penas, qué mejor que recordar los triunfos italianos en copas internacionales y, sobre todo, aquella victoria, justamente en tierras españolas, ocurrida hace, exactamente, 30 años.

España 82 según Joan Miró
Pues sí, el 11 de julio de 1982 Italia le colocaba la tercera estrella a su escudo al lograr el tricampeonato mundial que tanto esperaba desde aquellas lejanas gestas en los años 30. España 82 fue el marco del tercer título mundial de la azzurra y el Santiago Bernabéu, en Madrid, el escenario de esta inolvidable coronación final. Pero mejor recordemos, paso a paso, el largo camino de esta hazaña.

El camino de la azzurra

Nuevamente, Europa albergaría una Copa del Mundo, aunque esta vez serían 24 selecciones las encargadas de luchar por el máximo trofeo del fútbol. En el grupo 1, Italia aparentaba tenerla fácil jugando ante Polonia, Perú y Camerún. Sin embargo, la historia fue otra: llegada la última fecha del grupo, todos estaban igualados producto de sendos empates y lo único que permitió clasificar a los italianos fue un gol que los dejó arriba de Camerún por diferencia de goles, ya que su empate ante los africanos y la goleada de Polonia a Perú por 5-1 hicieron que pasaran de ronda en segundo lugar.

Esta discreta primera etapa de Italia contrastó notablemente con la espectacular demostración de fútbol de Brasil que, con sus figuras Zico, Sócrates, Falcão y Éder, arrolló a cuanto rival tuvo al frente. De esta manera, se convertía en la primera candidata al título mundial. Mientras tanto, Argentina dejaba muchas dudas, y su máxima estrella, Diego Armando Maradona aun no terminaba de asentarse en el equipo. De todos modos, las tres selecciones clasificaron y se vieron las caras en el grupo C de la siguiente fase.

Una vez dispuestos los cuatro grupos de la segunda parte del campeonato, los pronósticos daban como gran favorito a Brasil en el grupo C sobre Argentina e Italia, considerando las modestas muestras de fútbol de estos dos últimos y la maravilla de juego de la verde-amarela. Los albicelestes aún tenían fe en Maradona, pero su expulsión por agresión frente a Brasil significó la despedida de la joven estrella y, con ello, de su selección.


Mientras tanto, todos esperaban un baile a ritmo de samba en el último partido del grupo. Brasil e Italia se volvían a cruzar en un mundial y la diferencia vista hasta el momento no hacía presagiar buenas posibilidades para la
azzurra. Y mucho menos para un delantero resistido hasta el momento pero que, en ese partido, se destaparía para llevar a Italia hasta la gloria. Paolo Rossi se encargó de eliminar al mejor Brasil desde México 70 con un hat-trick propio de los grandes goleadores de la historia. El partido terminó 3-2 y, sin Brasil, la gente tenía que buscar otro candidato. Italia ya había demostrado de qué estaba hecha y, desde ese momento, fue imparable.


La final contra Alemania: el tricampeonato

Paolo Rossi, goleador del mundial con 6 goles
Italia no tuvo problemas para superar a Polonia en la semifinal. Su nuevo goleador, Paolo Rossi, volvió a ser crucial en la victoria frente a los polacos. Con un 2 a 0 incuestionable, los azzurri esperaban atentos a su rival en la final.

La otra llave enfrentó a Francia y Alemania en una semifinal jugada a muerte. El mediocampo galo, compuesto por Giresse, Tigana y Platini había maravillado en la fase previa donde vencieron a Austria e Irlanda del Norte. Mientras tanto, los germanos habían despachado a Inglaterra y España sin mucho brillo pero con su característica contundencia.

El partido fue muy disputado y, tras el empate 1-1, tuvieron que ir al alargue para dar su último esfuerzo. Las cosas parecían sonreírle a los franceses, quienes se pusieron 3 a 1 comenzando el primer tiempo suplementario, pero Alemania nunca bajó los brazos y, empujados por su figura Karl-Heinz Rummenigge, lograron empatar el juego 3 a 3. La historia de los penales la ganaron los teutones, pero el mundo no podrá olvidar la gran expresión de fútbol de una de las mejores generaciones del fútbol francés.

Pero, bueno, lo que nos convoca aquí no son las semifinales sino la final. El domingo 11 de julio de 1982 se enfrentaban Italia y Alemania. Ambas selecciones tenían dos títulos del mundo, con lo que la ganadora sería la segunda tricampeona luego de Brasil. La gloria estaba esperando a los vencedores.

El equipo que jugó la final ante Alemania. De izquierda a derecha, arriba: Dino Zoff, Francesco Graziani, Giuseppe Bergomi, Gaetano Scirea, Fulvio Collovati, Claudio Gentile; abajo: Bruno Conti, Paolo Rossi, Gabriele Oriali, Antonio Cabrini, Marco Tardelli.

Italia salió con todo en busca de la victoria. Antes de terminar el primer tiempo, el árbitro marcó un penal para los italianos. Lamentablemente, Antonio Cabrini mandó su disparo afuera y tuvieron que irse al descanso 0 a 0. A la vuelta, todo sería para Italia. Al minuto 57 —quién más—, Paolo Rossi abrió el marcador (era su sexto gol del torneo) y la ilusión del tricampeonato comenzaba a concretarse. Sobre todo, considerando que doce minutos después Marco Tardelli anotaba el segundo gol italiano. La imagen de la celebración de Tardelli es una de las más recordadas de la historia de los mundiales y es, sin lugar a dudas, la gran postal de España 82.


Pero la fiesta aún no terminaba. A nueve minutos del final, Alessandro Altobelli puso el 3 a 0, con lo que liquidaba las esperanzas de una posible remontada alemana. El descuento de Paul Breitner solo fue el tanto del honor para una selección germana que no llegó a brillar como en anteriores oportunidades. De este modo, la historia estaba escrita. Italia se convertía en el segundo tricampeón del mundo y nadie podrá olvidar a esta espléndida selección que fue de menos a más, pero que se ganó el respeto y la admiración del mundo entero.


Dino Zoff levanta la tercera Copa del Mundo para Italia

Como regalo, les dejo este enlace con la historia del tricampeonato italiano contada por sus protagonistas. Forza azzurri.